Archive for the 'juegos de palabras' Category

Ellas

Cuando él se iba a dormir ellas aprovechaban. Haciendo el menor ruido posible, se levantaban, iban lejos del cuarto en el que estaba él, y comenzaban a jugar con infinita libertad. Los juegos eran varios y no solian repetirse. Algunas veces se peleaban y otras se abrazaban abrumadas de felicidad, pero siempre casi al borde del llanto. Como si tuvieran una necesidad inmensa de desahogar todos los sentimientos reprimidos a lo largo del dia por los aburridos y estructurados intereses de él, tan lejanos de los sentimientos de ellas, se vestian y desvestian, se pintaban de todos los colores, se movian de aca para alla, se empujaban corrian y saltaban, generando tal desorden que costaba distinguir las unas de las otras. El espectaculo era abrumador y hubiera bastado observarlo un segundo para sentir algo que no se siente comunmente, que no se puede explicar mas que con palabras pero que es imposible elegir las adecuadas. Él nunca pudo ver este espectaculo, ya que ellas percibian cuando estaba empezando a despertarse y desaparecian de inmediato. Algunas veces él llegaba a ver a algunas pero nunca pudo verlas a todas y entonces entenderlas, apreciarlas, envolverse en ellas como quien encuentra el tesoro que siempre estuvo buscando. Él paso toda su vida sin saber los extraños acontecimientos que ocurrian en sus horas de descanso. Durante el dia se la pasaba sumergido en libros, papeles y pensamientos y de vez en cuando escribia cuentos y novelas que le servian solo para fortalecer su puño y debilitar sus ilusiones de llegar a ser un reconocido escritor . Murio finalmente sin grandes logros como escritor, ya que nunca supo que todas las palabras que busco incansablemente durante largos años aparecian, jugaban, reian y lloraban cada noche mientras el dormia.

Despreocupate, ocupate

Asi como el Otoño se lleva las hojas de los arboles, la ocupacion se lleva las angustias del pecho. No quiere decir que las arranque y las lleve hacia un rumbo incierto como hace el viento con las hojas, pero si que abre una visagra que deja pasar todas las preocupaciones vanales para dejar entrar a las ocupaciones actuales. En terminos linguisticos solo le sacamos las 3 primeras letras a una palabra y se transforma en otra totalmente diferente.  Como es sabido el prefijo «pre» denota un estado de anterioridad a la palabra que le sigue – en este caso «ocupacion». De esto podemos inferir que las preocupaciones nacen del exceso de 3 letras y la falta de lo que sigue (ocupaciones). Y porque se da esto? Porque si no estamos ocupados nos preocupamos? Porque nos adelantamos a los hechos, porque pensamos todas las alternativas posibles, porque tenemos el tiempo y el espacio necesarios, porque nos faltan los motivos pero nos sobran los razonamientos.

Si analizamos la palabra «ocupacion» podemos decir que significa llenar un espacio vacio, completar algo que no estaba completo, cambiar el estado de algo. Aca viene la paradoja que nos demuestra la vida frente a la linguistica: mientras mas ocupaciones tenemos mas preocupaciones surgen. Pero hay una diferencia en la ambiguedad de la palabra preocupaciones: cuando estas nacen de la falta de ocupaciones estan ahi y las sufrimos, son estaticas, crecen como una bola de nieve y no hacemos nada al respecto; en cambios las preocupaciones que surgen de las ocupaciones son dinamicas, pueden crecer pero se resuelven al ocuparnos de ellas.

No te preocupes, ocupate y despreocupate.

El Sol no es Solo

Está empezando a asomar el Sol y al palparnos la cara, nos damos cuenta de que no viene solo. No estoy hablando del efecto que causa en la piel, que hace que algunos se vean bronceados y recién llegados del caribe y otros nos veamos colorados al mejor estilo «palito de la selva», tampoco estoy hablando de la humedad que en general acompaña al sol y al calor y que hace que la gente que no tiene el pelo «como Dios manda» lo tome como un problema al que hay que encontrarle una solución o que hasta hay que prevenir (es muy posible que algun dia lleguemos a tener libros, programas de television y hasta institutos de «cuidados del pelo frente a la humedad»); sino que estoy hablando de los recuerdos que aparecen en nuestras mentes como si se produjera un traslado mental parecido al traslado físico que se produce en una frenada brusca del subte.

En mi caso, lo primero que se me viene a la imaginación en una tarde soleada, son imágenes de cuando faltaba algún profesor en el colegio y teníamos hora libre. Sobre todo en el último año del colegio, donde la única diferencia entre las horas libres y las que teníamos clases eran de forma y de ley. En las horas libres nos encontrábamos tirados al sol en el piso del patio mientras que en clase nos tirábamos dentro de los bancos, tratando de llegar al punto en el que la parte superior del respaldo se nos clavaba en la nuca – dolorosa pero encontrada sensación. La otra diferencia era la reacción del responsable a cargo al ver un objeto contundente de material como arenoso pero compacto volando hacia la frente de la más inocente del curso, la que no molestaba a nadie – siempre dependiendo de la puntería de nuestros tiradores.

Si logro dejarme llegar un poco más profundo en mi cabeza, rescato las mañanas soleadas de los sabados (mañanas de CAM.RE.VOC) en la edad en que todavía no salía de noche hasta tarde- menos los viernes – y aprovechaba los sabados a la mañana, en mi humilde opinión el mejor momento de la semana.

Cabe recordar que en general, uno también relaciona el calor con las vacaciones de verano, definitivamente la época más esperada del año por la mayoría de las personas y también la época de mayor ocio y diversión. Es más creo que a veces hasta me parece recordar esa brisa de ciudad de playa que nos hace escuchar como un sonido sordo el vaivén de las olas del mar… (como carajo es un sonido sordo??!!).

En fin, bienvenido sea el sol.

La influencia de la gente de izquierda

Primero que nada quiero aclarar que esto no intenta ser un relato político y mucho menos una crítica de los pensamientos o valores de algunos sectores de la sociedad. Solo es un ejemplo de como cualquiera puede tomar 2 o mas palabras o situaciones y buscarles alguna conexión mediante un juego de palabras, un recurso tan apreciado por mi, y analizarlas como si existiera una relación entre ellas. Muchas veces por pura coincidencia podemos encontrar realmente sentido en estos juegos de palabras, otras veces no… No queda en mi definir si esta vez existe algun grado de veracidad en los resultados de mi análisis.

Se habran dado cuenta  que la mayoria de las peronas usan el reloj en el antebrazo izquierdo. Durante muchos años no le di importancia al asunto – es más inconscientemente lo veía como una posición natural, como si un reloj en el brazo derecho quedara mal – pero ahora me doy cuenta que ha llegado el momento de analizar este fenómeno.

El reloj es un invento del hombre para medir el tiempo. Si se quiere podemos llegar a decir que el tiempo en si es una unidad de medida de los «eventos» internos del hombre (sentimientos, pensamientos, etc…) y el concepto de segundos, minutos y horas lo unico que hacen es marcar una cronología cuantificable a los hechos.

La vida del hombre pasa, el tiempo permanece; «tu eres tiempo el que te quedas, y yo soy el que me voy» (Góngora). En fin, todos creemos entender el concepto de tiempo.

Ahora, que divertido que llevemos el reloj en el antebrazo izquierdo, siendo zurdos o diestros, que la izquierda lleve el reloj, es decir que la izquierda lleva el control del tiempo… 

En la Argentina se suele decir que la gente no tiene memoria. No voy a ampliar este punto, solo voy a decir que algunas cosas si se suelen recordar con cierta frecuencia… Como el tiempo lo maneja la izquierda, esta es quien selecciona las cosas a recordar… y hay fechas en las que se vuelve el tiempo atras para recordar algunas cosas…otras no.

En mi caso, usé reloj en el antebrazo izquierdo durante muchos años hasta que se me rompió la malla y me dijeron que era irreparable. Hoy en día uso el celular para mirar la hora y me sirvo de las dos manos para usarlo ya que lo guardo en el bolsillo izquierdo entonces necesito la mano izquierda para sacarlo del bolsillo pero en seguida lo paso a la mano derecha, mi mano hábil, para abrir la tapita y mirar la hora. Fijense como el uso de la tecnología, en este caso, hace que la izquierda y la derecha se complementen…

Esto es solo un ejemplo, no estoy queriendo decir que la tecnología influya en la izquierda y la derecha porque eso no es verdad, o si? Mi punto es que la evolución de las cosas tiene que llevar al complemento de las personas, a la unión y no al distanciamiento.